Grafología. Las obsesiones vistas en la letra.

¿Qué es el TOC? Estas siglas corresponden a lo que comunmente llamamos trastorno obsesivo compulsivo.

Si usted conoce a alguien a quien le da por levantarse mil veces de la cama para comprobar si apagó la luz o el gas o necesita de santiguarse compulsivamente antes de salir a la calle…pues de esto se trata.

Este déficit de control interno es la que empuja a estas personas a controlar su ambiente y su seguridad de forma tan exagerada.

Antaño se le atribuía a una cualidad de petición magica y divina que encajaba en la sociedad de formas muy distintas a las de hoy.

Pero como en este espacio tratamos de detectar este tipo de problemáticas a través de la escritura, me limitaré a dar puntos concretos para detectarlos.

Los puntos de las «i» suelen estar sobreescritas viéndose un mayor flujo de tinta en esta zona ya que se marcan más.

También suelen querer adornar la inicial de la firma, a modo de reconocimiento personal, dándose allí retoques y rúbricas impensables.

En determinados casos muy extremos, el miedo no les deja articular las líneas adecuadamente.

Por ejemplo, firmar o escribir hacia la izquierda o bien comerse el márgen de este lado, son indicación de la posibilidad de rasgos obsesivos.

Sea como fuere siempre nos indica inseguridad, miedo a las emociones y a ir hacia lo nuevo.

Ser demasiado perfeccionista a la hora de escribir también nos lleva hasta este tipo de individuos.

Esto refleja la manía de lo que los demás pensarán de ellos por lo que les hace lentos por miedo a estar obrando mal.

Estas inquietudes sin embargo consiguen que en el escrito aparezcan puntos innecesarios, óvalos pinchados o quizás enroscados.

Al comprobar lo realizado y ver estas fallas, se activan los sentimientos de culpa e inhibición en la persona.