Análisis grafológico de un acosador moral.

El análisis grafológico de un acosador moral, del tipo que sea, en el trabajo, en la escuela, en el vecindario, parece haberse puesto de moda.

Podríamos definirla como la violencia psicológica que un grupo ejerce sobre un individuo hasta conseguir llevarlo al agotamiento para su propio rendimiento.

Desestabilizar, suprimir a un compañero del puesto de trabajo tras mil maquinaciones, insultarle verbalmente sin ningún tipo de escrúpulo, hacerla fracasar en cada una de sus iniciativas son tan sólo unas cuantas de las cosas a tener en cuenta dentro de esta problemática.

La sistemática erosión de la autoconfianza de la persona consigue destruirle la salud física también.

Como por lo general el acosador ya diseñó un plan para echar por tierra la reputación de la víctima, salir de este pozo no es sencillo sin ayuda especializada.

Por esto, es importante para todos ustedes conocer el análisis grafológico de un acosador moral, no sea que cerca les ronde alguno.

El ya familiar mobbing induce intencionadamente a cometer errores  modificando por ejemplo el entorno laboral para acusar al acosado de mal rendimiento cuando realiza su trabajo.

Desconfíe de quienes en un principio halagan su buen hacer con demasiada frecuencia.

Uno de los rasgos que hemos de detectar en las grafías de todos ellos es su facilidad para la manipulación y la mentira.

Cuando las tácticas aparentemente generosas dejen de dar resultado, irán a la fase de las amenazas y las coacciones.

Créanme, pasarán a la acción.

En el análisis grafológico de un acosador moral se tiene inevitablemente que valorar el grado de falsedad a la hora de relacionarse socialmente.

Su nivel de aspiraciones, si es capaz de albergar envidias patológicas o si surgen ángulos, anzuelos, pinchos a lo largo del escrito, nos ayudará a ponernos sobre aviso.

A veces es necesario observar la comunicación general con jefes y colegas pues podemos encontrarnos con un sujeto que trabaja en la sombra ayudado de un grupo cómplice.

Él se mantendrá al margen como si nada, pero estará muy atento a la evolución de los acontecimientos.

Y sobrecargar de trabajo extra es otra de las argucias utilizadas.

Si consiguen que no llegue a conseguir llegar a sus propios objetivos laborales, habrán triunfado y ustedes…habrán perdido.

No puede tampoco faltar en el análisis grafológico de un acosador moral el grado de espiritualidad pues por lo general son narcisistas y muy apegados a todos los bienes raíces.

En este caso conviene observar los pies de la escritura.

Si son amplios, no avanzan hacia la siguiente letra o tan sólo tienen un mal desarrollo.

Instigadores del rumor, les pondrán en aprietos con las demás personas.

Todos sabemos que la mayoría de las veces el chisme suele deberse a malos entendidos, pero no podemos reprimir caer en sus trampas y dejarnos llevar por los comentarios hechos.

Si esto es así, deberán tomar el control intentando ir uno por uno aclarando este tipo de situaciones llevándolas a un lado favorable.

Cuando hacen esto se darán cuenta de quienes son los compañeros leales y los desleales.

Los del primer grupo también se verán metidos en el ajo y se cuidarán de próximos comentarios del personaje en cuestión.

El análisis grafológico de un acosador moral siempre nos ayudará a quitarles la máscara.

Los testigos mudos pululan por todas partes.

Les llamo así porque están al tanto de la situación de abuso pero que sólo miran hacia el otro lado.

Quizás también hayan sido amenazados y prefieren estar al margen.

Desde aquí un llamamiento a jefes y directivos para que controlen estos actos delictivos.

Y como decíamos anteriormente todo esto trae repercusiones negativas para la salud que además de buenos dolores de cabeza y angustia afectan a músculos y articulaciones.

Es fácil caer en el insomnio, con enfermedades gastrointestinales y cardiovasculares.

Si cree que se siente identificado con el contenido de este post y quiere realizar el análisis grafológico de un acosador moral que le intimida a usted o a sus seres queridos, pueden ponerse en contacto conmigo.